Nieve y Esquí, elegir la ropa adecuada

Para disfrutar de un día de esquí, además de buena nieve, hace falta que estemos confortables durante horas.

Para una correcta elección a la hora de comprar o alquilar, debemos tener en cuenta:

  • Las condiciones del centro de esquí
  • Nivel de esquiador
  • Presupuesto
  • Las preferencias personales en cuanto a estilo, talle, forma y color

Las condiciones Climáticas

Cada centro de esquí y nieve, de acuerdo a su ubicación, altura, etc tiene condiciones de clima y nieve particulares.
En Bariloche, por lo general las condiciones climáticas usuales en junio/julio son de clima y nieve húmeda, en julio/agosto la nieve y el clima es más seco y en agosto/septiembre tenemos “nieve primavera”, muy buena para esquiar de mañana, luego el sol la ablanda (tipo sal gruesa). Y obviamente, no es lo mismo esquiar con sol que nublado y con viento moderado o fuerte.

Los nuevos tejidos
Los grandes cambios en tejidos y materiales que se han producido en los últimos diez años influyen en nuestra elección a la hora de vestirnos ante diversas situaciones térmicas.
La ropa interior térmica ha revolucionado la vestimenta, y, sin lugar a dudas, se ha convertido en la prenda más importante en nuestro armario. Es mucho más importante la ropa cuanto más cerca está de nuestro cuerpo. Sin embargo, no es nada raro ver a gente con camperas de alta gama sobre camisetas de algodón, que son totalmente desaconsejables.
La labor fundamental de la ropa térmica es secar nuestro cuerpo, ya que la humedad es la forma más rápida que tenemos de perder calor. Hablamos de la pérdida de calor porque no existe prenda que nos lo de, sino que lo que hacen realmente, es aislarnos.

La primera capa es muy importante y nos permanecer secos cuando estamos en la silla, que es donde nos quedamos congelados si no vamos suficientemente aislados. Hay una gran cantidad de calidades dentro de la mayoría de los fabricantes que pueden complicar la elección, pero los materiales varían en función cuan aeróbico sea el ejercicio (cuanto más se sude más ligera será esta capa, para que se seque primero y cuanto más gruesa, más se acercaría a la función que se le suele dar a la segunda capa aislante).
La segunda capa, o capa aislante, ofrece muchas posibilidades en función del calor corporal de cada persona y de la temperatura exterior. En general una buena camiseta térmica, un polar 100 y una tercera capa impermeable y transpirable suele ser lo más usual para una climatología que no supere los diez bajo cero.

En los tres últimos años se está imponiendo una prenda que no se puede catalogar exactamente como segunda capa, ya que también hace las veces de tercera capa o exterior: el softshell. Ya ampliamente conocido y utilizado, el softshell no es más que un rompevientos (windstopper) cuyo tejido exterior tiene muy buenas cualidades con respecto a la lluvia. No es cien por cien impermeable, pero sí que aguanta bastante agua, y sobre todo es muy hidrófugo (repele el agua), con lo que, aunque te mojes, seca muy rápidamente. Como debajo también llevamos prendas hidrófugas nuestro cuerpo estará seco.

La tercera capa o prenda exterior. En primer lugar vamos a diferenciar dos tipos de chaquetas impermeables, las que tiene relleno térmico, y las que no lo tienen. Las primeras son las más clásicas y vienen utilizándose desde mucho antes de que aparecieran las membranas como Gore-Tex, por ejemplo.
Rellenas con pluma
Realizadas normalmente con al menos 50% de plumas de ganso o plumones de pato. No se recomienda usarlas en condiciones de humedad ya que una vez que se moja, tarda mucho tiempo para secarse. Aptas para condiciones muy frías y secas, paseos de invierno o después de esquiar.

Rellenas con sintético
Una versión artificial de plumón, materiales con buen efecto aislante. La diferencia es que la tela también puede ser impermeable, transpirable, menos voluminosa, generalmente elástica y por lo tanto es más fácil de moverse. Aptas para el tiempo húmedo y frío y para tareas como el esquí o el snowboard

Por último hablaremos del pack-lite. Es el más ligero y su apariencia es la de un rompimientos. Pero no nos engañemos, es una autentica prenda exterior impermeable y transpirable. Se usa para actividades muy aeróbicas pero, combinado con, por ejemplo, un softshell, esta llegando a ser una de las prendas más usadas para todo tipo de actividades, ya que su ligereza y compresión hace que puedas llevarlo en una pequeña mochila o incluso colgando de tu cintura.